LA INTENCIÓN es el punto de inicio de cualquier sendero espiritual.
La intención incluye voluntad, propósito, aspiración y la más elevada
visión. Si tu diriges tu intención hacia Dios, el espíritu crece.Una vez
que tu plantas la semilla de una intención, el viaje de tu alma se
desenvolverá automáticamente.
Reglas:
1.- Conoce y
descubre tus verdaderas intenciones. Las falsas intenciones asumen la
forma de deseos culposos. Reconoce el sentimiento, descártalo y
permanece alerta hasta que encuentres la intención que se esconde detrás
de este.
2.- Establece tus intenciones elevadas. Ten una visión alta.
Comienza a ver milagros alrededor de ti.
3.- Visualízate en la LUZ. El
EGO mantiene su dominio al hacernos sentir necesidades y quitarnos
fuerza.De esta sensación de pérdida, crece la ansiedad de adquirir todo
lo que vemos. Tu puedes escapar de esto si te vez dentro de la LUZ... no
luches con ella.
4.- Refuerza tus intenciones todos los días. La vida
diaria es una demanda continua del ego. Necesitas recordarte todos los
días tu propósito espiritual. A algunas personas les ayuda a escribir
sus intenciones, meditar, leer. Encuentra tu centro: interiorízate y no
dejes ir tu INTENCIÓN hasta que la sientas centrada dentro de ti.
5.-
Aprende a perdonar y a dejar ir. Debes estar preparado para dejar ir tus
creencias, tus pensamientos y tus acciones de hoy, independientemente
de cómo te sientas. Cada nivel de crecimiento es bueno, todos están
alimentados por Dios.
6.- Rompe el miedo. Deja que el espíritu te guie.
Tu intención es la herramienta más poderosa que tienes. Ejercítala y
luego, suéltate y permite que las oportunidades vengan a tu encuentro.
Ellas llegan a tu encuentro naturalmente.
7.- Abraza lo desconocido. A
través de los años has formado preferencias y patrones. Todo esto a
través del "yo" que ya conoces. Nada de esto es tu verdadero SER.
Lo
desconocido te está esperando.Cuando sientas un nuevo impulso, un
pensamiento elevado, una vision interior que nunca hayas tenido antes,
abrázalo, abraza lo desconocido, entonces serás libre.
D. Chopra-