Dice un aforismo Zen que "para alcanzar tu felicidad interior, agarra con suavidad y suelta con fuerza."
Y es que el sufrimiento surge de aferrarnos a algo que según nosotros deberíamos tener o a alguien que debería estar a nuestro lado.

Pero a la realidad le da igual si estamos de acuerdo con ella o no. La vida sigue su curso tanto si estamos de acuerdo como si no. Aceptar las cosas tal y como son es la única manera de encontrar la paz interior. No soltar, es empeñarse en querer que las cosas sean distintas de las que son.
El sufrimiento empieza cuando nos contamos la historia de quién y qué debería estar en nuestra vida. Y lo cierto es que averiguar quién o qué debería estar o no estar es muy fácil: mira tu vida, lo que hay es lo que debe haber.
Amar es recibir las cosas como son y con gratitud, y no querer cambiarlas.
Esto lo Acabo de leer en una página maravillosa ! devivencias.com
Y muy emotivo el video de youtube que incluyeron en este artículo, se me ocurrió que sería un herramienta muy buena para trabajar con adolescentes.
http://www.youtube.com/watch?feature=player_embedded&v=mLryFVsfJAM