Translate

domingo, diciembre 01, 2013

DEMOS DE LO QUE NOS FALTA, NO LO QUE NOS SOBRA


Evangelio de San Lucas 21, 1-4


todos dan ofrendas de lo que les sobra, pero ella, en su pobreza, ha dado todo lo que tenía para vivir...
todos dan ofrendas de lo que les sobra, pero ella, en su pobreza, ha dado todo lo que tenía para vivir...
1 Jesús estaba viendo a los ricos echar dinero en los cofres de las ofrendas, 2 y vio también a una viuda pobre que echaba dos moneditas de cobre. 3 Entonces dijo:--De veras les digo que esta viuda pobre ha dado más que todos; 4 pues todos dan ofrendas de lo que les sobra, pero ella, en su pobreza, ha dado todo lo que tenía para vivir.

MEDITACIÓN

¿Seríamos capaces de darlo todo? ¿Seríamos capaces de entregarnos por completo? Quizás muchos de nosotros lo hemos dado todo por nuestros sueños y metas. Seguramente los que tenemos hijos hemos ido más allá de nuestras posibilidades para que ellos tengan todo lo necesario. Tal vez le hayamos entregado a nuestro cónyuge todo nuestro ser. En algún momento de nuestra vida le habremos puesto todo nuestro empeño a alguna causa especial. El que tiene la capacidad de darlo todo es porque confía plenamente en Dios y reconoce que el Padre jamás dejará de proveerle lo que necesita. Es fácil dar de lo que nos sobra, regalar lo que ya no nos sirve, servir durante nuestro tiempo libre.


Y claro está, mejor es dar que no dar nada, pues muchos se pueden beneficiar de lo que tenemos de más. Simplemente hay que estar preparados cuando Jesús nos pida no de lo que nos sobra sino de lo poco que tenemos.
También importa la actitud que tenemos cuando damos a los demás, la alegría que brota de nuestro corazón cuando damos algo, la conexión que establecemos con el que recibe. Debemos tener nuestro corazón siempre abierto a la caridad y a la entrega. La viuda del Evangelio dio lo único que tenía, de la misma manera nos corresponde a nosotros en muchas ocasiones darnos por completo, ofrecer todos nuestros esfuerzos y habilidades, dar lo mejor de nosotros a los demás.
 
Amadísimo Jesús, ayúdame a entregarme como tú lo hiciste. Quiero ofrecerte mi tiempo y mis capacidades, mi espacio y mis posibilidades, mis pensamientos y toda palabra que salga de mi boca. Confío en ti, Señor.

Para la reflexión:
+¿Qué te cuesta dar más: tu tiempo, tus bienes materiales, tu ser interior?+
¿Cómo te sientes cuando eres tú el que recibes?

1 comentario:

Anónimo dijo...

Hola! Vaya... Si que es verdad que tienes un buen blog... Muy interesante sigue así:)
Yo también tengo un blog que cree hace poco que te podría interesar, las entradas van sobre amor o situaciones o consejos de la vida.me gustaría que tu, que tienes experiencia en esto, le echaras un vistazo y me des tu opinión. De verdad, muchas gracias y sigue así :)
aquí mi blog: www.van500tequieroporcadamirada.blogspot.com