El amor sólo puede existir cuando está
ausente el pensamiento del “Yo” y la libertad con respecto al “Yo”
reside en el conocimiento propio y así llega la comprensión. El amor no
tiene nada que ver con la sensación, que no es un medio para realizarse.
El amor existe por sí mismo, sin ningún resultado.
Para la mayor parte de la gente, el amor
está vinculado con el sexo y el placer y todos los tormentos que los
acompañan: celos, envidias, antagonismos.
Uno ha de terminar con todo el
conocimiento acumulado cada día, heridas psicológicas, compararse con
otra persona, compadecerse a sí mismo… terminar con todo eso cada día,
de modo que al día siguiente la mente de usted sea fresca y joven. Una
mente así nunca puede ser lastimada, y eso es inocencia. Uno de las
cosas extrañas relacionadas con el amor es que cualquier cosa que
podamos hacer, será correcta si amamos. Cuando hay amor, la acción es
siempre correcta, en todas las circunstancias. Y cuando existe esa
calidad del amor, hay compasión. La compasión implica pasión por todo.”
Krishnamurti